martes, 30 de octubre de 2012

Problemas visuales: miopía, hipermetropía y astigmatismo


La miopía

Del griego myops formado por myein (entrecerrar los ojos) y ops ojo, es el estado refractivo en el que el punto focal se forma delante de la retina cuando el ojo se encuentra en reposo, en lugar de en la misma retina como sería normal.
Es un exceso de potencia de refracción de los medios transparentes del ojo con respecto a su longitud, por lo que los rayos luminosos procedentes de objetos situados a cierta distancia del ojo convergen hacia un punto anterior a la retina.
Una persona con miopía tiene dificultades para enfocar bien los objetos lejanos, lo que puede conducir también a dolores de cabeza, estrabismo, incomodidad visual e irritación del ojo.

La hipermetropía

Es un defecto ocular que consiste en que los rayos de luz que inciden en el ojo  procedentes del infinito, se enfocan en un punto situado detrás de la retina, en lugar de en la misma retina como sería normal.
La consecuencia es que la imagen es borrosa y puede existir por lo tanto una falta de agudeza visual.






El astigmatismo

Del griego α (sin) y στιγμη (punto), es un estado ocular que generalmente proviene de un problema en la curvatura de la córnea, lo que impide el enfoque claro de los objetos tanto lejos como cerca.
La córnea, que es una superficie esférica, sufre un achatamiento en sus polos, lo cual produce distintos radios de curvatura en el eje del ojo, por ende cuando la luz llega al ojo, específicamente en la córnea, la imagen que se obtiene es poco nítida y distorsionada.




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lunes, 22 de octubre de 2012

Gafas de farmacia sin garantía sanitaria, peligro


Los ópticos-optometristas malagueños han denunciado en reiteradas ocasiones la venta de gafas destinadas a la corrección de la vista cansada sin ningún tipo de control que se realiza fuera de las tiendas de óptica.
Según este colectivo, las lupas-gafas se fabrican con lentes de baja calidad óptica y se distribuyen a través de establecimientos no autorizados como tiendas de regalo, bazares, gasolineras o supermercados y farmacias. Hacer uso de este tipo de correctores sin el asesoramiento de personal cualificado puede provocar importantes daños visuales, según Alberto Talero, delegado en Málaga del Colegio Nacional de Ópticos-Optometristas, quien además afirma que “laslupas-gafas premontadas no son una solución por estar fabricadas bajo un estándar que sólo se ajusta a las necesidades de un 5% de los usuarios”.
Además, al no existir control sanitario no es posible determinar con exactitud los materiales con los que está fabricado. “Las lentes están fabricadas en su gran mayoría en plástico inyectado y sin ningún tipo de tratamiento, por lo que la imagen que producen tiene una gran cantidad de aberraciones y no cuentan, en la práctica, con ningún tipo de control sanitario ni de calidad óptica“, asegura Talero.


La vista cansada o presbicia

La vista cansada, o presbicia, es un defecto fisiológico natural que empieza a manifestarse a partir de los 40 años de edad. Se produce porque el músculo ciliar, encargado de aumentar la capacidad de refracción para que el cristalino pueda enfocar objetos cercanos, pierde elasticidad, y por tanto, disminuye la capacidad de acomodación o enfoque del ojo a distancias cortas.
Un tratamiento seguro, previo diagnóstico profesional, sería lo apropiado para prevenir futuras lesiones graves. Es fundamental tener en cuenta las necesidades, características y estilo de vida de cada individuo y además se pueden realizar ejercicios de terapia visual para corregir el “cansancio de la vista”.
El Colegio recomienda varios tratamientos ópticos para la presbicia, entre los que se incluyen las lentes monofocales, bifocales, ocupacionales y progresivas, así como las lentes de contacto.
El uso continuado de gafas-lupas además puede originar, entre otros, futuros problemas de adaptación a lentes progresivas y el deterioro de la visión: “Al estar las lentes montadas bajo un estándar, el centro óptico de las lentes no coincide con el eje visual de los ojos, por lo que el uso continuado de este artículo induce a diversos efectos y se producen síntomas de disconfort visual y, a corto plazo, un deterioro de la visión en muchos sentidos”.
La comercialización de este tipo de lente no sólo puede provocar daños mayores sino que incumple la normativa legal vigente que establece que se trata de un producto destinado a ser utilizado por personas con fines de compensación de una deficiencia y por tanto es un producto sanitario que únicamente puede ser vendido en establecimientos garantizados. El Colegio de Ópticos-Optometristas de Andalucía, Ceuta y Melilla ya denunció en junio de 2009 el consentimiento de esta práctica

jueves, 4 de octubre de 2012

Los eBooks y la Visión



Está claro que con la llegada de los libroselectrónicos o e-books vamos a enfrentarnos a otra transición en la forma de utilizar nuestrosistema visual.


La visión próxima y por declinación la lecturafue en su momento un cambio radical para unsistema visual adaptado durante siglos a trabajar en visión de lejos. Ahora bien, entre todos esos cambios que el ser humano y su sistema visual ha ido siguiendo a lo largo de los siglos tal vez ninguno haya sido tan radical como pasar de la lectura en papel a la lectura en las pantallas.




Por tanto, la pregunta obvia seria:
¿Es que la lectura sobre un libro electrónico o una pantalla afecta a nuestros ojos?

Los médicos defienden que la lectura en una pantalla no causará ningún daño.
El Dr. Travis Meredith, presidente del departamento de oftalmología de la Universidad de Carolina del Norte, Chapel Hill, defiende que “Sentarse cerca de un televisor o pantalla de ordenador, no es malo para nuestros ojos. Es una variedad de otros factores que pueden causar la fatiga visual».

Por ejemplo, la ergonomía de las pantallas de lectura y la falta de parpadeo cuando se miran, pueden desempeñar un papel importante en la fatiga ocular. “El problema actual con la lectura en las pantallas es que tenemos que ajustar nuestros cuerpos a nuestras pantallas, en lugar de las pantallas a nosotros”, dijo el Dr. Meredith.

Sin embargo, en estos mismos momentos está desarrollándose un vivo debate entre los aficionados de e-books y los de libros de papel sobre cuál de los dos soportes de lectura es mejor para los ojos.
La respuesta no es tan sencilla como podríamos llegar a pensar.

Los médicos y los investigadores señalan que en la mayoría de los casos, el papel puede ofrecer una mayor satisfacción visual que una pantalla. Sin embargo, ciertos tipos de papel, incluyendo papel de bajo costo y el papel utilizado para imprimir los libros de tapa blanda, pueden proporcionar una calidad de lectura inferior a la de los medios electrónicos.

Por otro lado, en lo que respecta a los e-books, en la actualidad existen numerosas tecnologías de visualización disponibles en el mercado, desde el blanco y negro del E Ink, el Kindle de Amazon y el Nook de Barnes & Noble, hasta pantallas LCD a todo color como en el iPad de Apple.

Michael Bove, director del Laboratorio de Electrónica de Consumo en el MIT Media Lab, dice que las diferentes pantallas sirven para diferentes propósitos.

“Depende de las circunstancias de visualización, influyendo también el software y la tipografía usados en la pantalla“, dijo Bove. “Por ejemplo, E Ink es la mejor solución para leer a la luz del sol, sin embargo en ciertas situaciones, un pedazo de papel puede proporcionar una mejor calidad de visión que el E Ink, y con poca luz, una pantalla LCD puede ser mejor que todas las otras tecnologías”.

Volviendo sobre el E Ink, este e-book tiene una relación de contraste muy bajo, a pesar de que pueden ofrecer una excelente experiencia de lectura a la luz del sol, las pantallas, puede resultar incómodas para su uso en entornos oscuros debido a la falta de contraste y luz de fondo en la pantalla.

Las pantallas LCD, mientras tanto, han luchado durante mucho tiempo para ofrecer buenos ángulos de visión para la lectura. El más reciente, el iPad de Apple con pantalla LCD, proporciona ángulos de visión muy amplios, pero el vidrio reflectante con el que está fabricada la pantalla podría ser un obstáculo en situaciones de fuerte iluminación.

El profesor Alan Hedge, director del laboratorio de  Human Factors and Ergonomics Universidad de Cornell, opina que la reducción de la fatiga ocular es más una cuestión de realizar pausas cortas cuando se trabaja de forma prolongada sobre una pantalla que de elegir una pantalla específica. “Mientras que usted está leyendo, sus ojos hacen cerca de 10.000 movimientos por hora. Es importante hacer una pausa cada 20 minutos y dejar a sus ojos descansar».

Por otro lado, los fabricantes trabajan en mejorar el rendimiento y el confort de lectura en sus pantallas, de esta manera las pantallas actuales son mucho mejores que las antiguas. Carl Taussig, director del Hewlett-Packard’s Information Surfaces Lab, comenta que la frecuencia de actualización de 120 Hz típica de las pantallas modernas es mucho más rápida que lo que nuestros ojos pueden llegar a ver. Según él, “Los nuevos LCDs no afectan a sus ojos. Hoy en día la actualización de las pantallas se realiza cada ocho milisegundos, mientras que el ojo humano se desplaza a una velocidad de entre 10 y 30 milisegundos.”

Igual que se comentaba antes, el Sr. Taussig aconseja elegir el tipo de pantalla que más se adapte al uso que cada persona vaya a hacer de ella. “Yo no creo que exista una única tecnología que sea óptima para todas las cosas que queremos hacer con nuestros dispositivos. Por ejemplo, HP  vende 65 millones de dispositivos al año, y todos ellos son utilizados de formas diferentes”.

Espero que os resulte interesante.

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